He cumplido 28 años y estoy feliz y nostálgica a la vez. Estoy nostálgica porque muchas personas con las que me gustaría haber compartido ese día no estuvieron conmigo. Sin embargo, fue un día muy especial, porque era mi cumpleaños. Hoy hice mi último examen y por eso no pude celebrar (léase: como debe ser), tuve que estudiar y aprender sobre fundaciones y pilotes y todos los tipos de cargas que pueden afectarlos y sobre presiones de suelos pasivas y activas y coeficientes de seguridad para resistencias y cosas que para nada son interesantes en el sentido personal de este post. (Esta línea no se debería haber sido escrita, pero lo dejo así, total mi cerebro todavía esta lleno de γs, βs, y φs.)
Durante los últimos años han sucedido cosas que han terminado de definir mi personalidad y mi forma de encarar la vida. Realicé muchos sueños y eso me llena de satisfacción y me hace fuerte. Me uní más con mi familia y perdí muchos amigos que me lastimaron y también lastimé a los amigos que me lastimaron. Luego sané y acepté que hay cosas que tienen que irse y que lo que no es para uno, simplemente no es. Reforcé la relación que tengo conmigo misma y con mis pensamientos y me encontré con un mundo nuevo, con la soledad y finalmente con la felicidad, si se puede llamar así lo que estoy sintiendo.
Lo que hoy soy me gusta mucho. Y eso es gracias a todos los que construyeron a mi lado mis propias circunstancias. Aún cuando muchas cosas me hayan jodido en el alma y complicado la vida, y me hayan puesto en suelo queriendo y sin querer. También es gracias a todos los que lastimé y puse en el suelo queriendo y sabiendo, y sin querer y sin saber. Las cosas buenas serán buenas para siempre y las malas serán malas para siempre. No importa si las hice yo o si las hicieron los otros, el equilibrio siempre existe y yo creo en eso.
Esta es la mejor edad. Es la edad en la que no estoy tan chica para no saber lo que quiero, y no estoy tan vieja como para que las experiencias pasadas me nublen el futuro. Suena medio bruto pero así veo las cosas.
Todo se transforma dice Jorge Drexler, todo lo que dimos vuelve a nosotros, y todo lo que recibimos, es devuelto.
Aquí un videito que yo misma hice, para todos.
Durante los últimos años han sucedido cosas que han terminado de definir mi personalidad y mi forma de encarar la vida. Realicé muchos sueños y eso me llena de satisfacción y me hace fuerte. Me uní más con mi familia y perdí muchos amigos que me lastimaron y también lastimé a los amigos que me lastimaron. Luego sané y acepté que hay cosas que tienen que irse y que lo que no es para uno, simplemente no es. Reforcé la relación que tengo conmigo misma y con mis pensamientos y me encontré con un mundo nuevo, con la soledad y finalmente con la felicidad, si se puede llamar así lo que estoy sintiendo.
Lo que hoy soy me gusta mucho. Y eso es gracias a todos los que construyeron a mi lado mis propias circunstancias. Aún cuando muchas cosas me hayan jodido en el alma y complicado la vida, y me hayan puesto en suelo queriendo y sin querer. También es gracias a todos los que lastimé y puse en el suelo queriendo y sabiendo, y sin querer y sin saber. Las cosas buenas serán buenas para siempre y las malas serán malas para siempre. No importa si las hice yo o si las hicieron los otros, el equilibrio siempre existe y yo creo en eso.
Esta es la mejor edad. Es la edad en la que no estoy tan chica para no saber lo que quiero, y no estoy tan vieja como para que las experiencias pasadas me nublen el futuro. Suena medio bruto pero así veo las cosas.
Todo se transforma dice Jorge Drexler, todo lo que dimos vuelve a nosotros, y todo lo que recibimos, es devuelto.
Aquí un videito que yo misma hice, para todos.
Feliz cumple a mi!